Sinopsis oficial
30 años después de los eventos que tienen lugar en la primera película, un nuevo blade runner, el Agente K del Departamento de Policía de Los Angeles (LAPD), desentierra un antiguo secreto que tiene el potencial de sumir lo que queda de la sociedad en el caos. El descubrimiento de K le conduce a la misión de encontrar a Rick Deckard, un antiguo blade runner que ha estado desaparecido durante tres décadas.
La crítica -
Por J.M.S.
Elaborar una secuela de calidad de una película tan mítica como Blade Runner suponía un reto enorme. A eso se ha enfrentado el cineasta canadiense Denis Villeneuve (responsable de films tan potentes como Sicario o La Llegada) y ha logrado un largometraje excelente desde el momento en que logra dar continuidad, con bastante fidelidad, a todos los temas planteados en la original: muestra el vacío de una sociedad deshumanizada donde impera la soledad y en la que los seres humanos son incapaces de reconocer el valor de la vida; un mundo en el que las relaciones familiares son casi inexistentes y donde los replicantes “más humanos que los humanos” poseen un sueño: no haber sido creados artificialmente sino concebidos como resultado de una relación amorosa.
Han transcurrido 30 años desde los acontecimientos ocurridos en la película original y, tras la quiebra de la empresa Tyrell y ante la necesidad de mano barata, otro empresario sin escrúpulos, Niander Wallace, ha tomado el relevo en la fabricación de replicantes, ahora tremendamente obedientes. Como ocurrió en el pasado se ha iniciado la búsqueda de los Nexus 8, que no tenían fecha de caducidad, y, nuevamente, los encargados de “esa caza” son los denominados Blade Runner. Uno de ellos, el agente “K”, iniciará una investigación para desentrañar un secreto que puede cambiar el curso de la humanidad y que le reportará no pocas sorpresas.
Con una atmósfera y una estética tan apocalíptica como la original, Blade Runner 2049 es impresionante tanto en sus efectos visuales como digitales, a este respecto son fantásticos lo bien que funcionan los hologramas en el desarrollo de la trama o la calidad mediante la cual se recrea, gracias al ordenador, a algún personaje. Bien elegido el reparto, entre los diálogos destaca uno que mantienen Ryan Gosling y Harrison Ford. En el guión se ha contado con Hampton Fancher (que colaboró en la historia de Blade Runner) y Michael Green.
Como la perfección cinematográfica no existe, falla Villeneuve cuando se recrea y ralentiza innecesariamente en alguna secuencia donde la belleza formal de algún escenario es apabullante y, lógicamente, no ha podido superar un valor añadido que poseía la película original de Ridley Scott y que la ha convertido en una obra maestra: el monólogo poético del replicante Roy Batty (que Rutger Hauer improvisó en parte) en el climax de la película.
No obstante, Blade Runner 2049 pasará a la Historia del cine como una de las mejores secuelas realizadas de un clásico. Estamos ante una película continuista muy bien engrasada.