A esta iniciativa se une la rehabilitación con criterios 'Passive House' dirigidos a la eficiencia energética, que se unirían a las ayudas ya existentes de los servicios sociales. El estudio refleja como causas potenciales de afección de la pobreza energética los ingresos en el hogar, las condiciones de la vivienda, el desconocimiento del lenguaje energético, la dificultad de administrar los recursos del hogar así como el precio de los suministros y la falta de transparencia del mercado energético. Se calcula que esta problemática afecta a unas 96.000 personas en Navarra, 29.000 en Pamplona.