Unos trabajos que forman parte de un plan mucho mas amplio para la remodelacion del Palacio de Navarra, que se llevará a cabo en 2017. Según el ejecutivo, el deterioro es generalizado. Entre los problemas detectados, la Consejera de Interior señala la insuficiencia de espacios habilitados para trabajar, deficiencias en la instalación eléctrica, filtraciones en la fuente del jardín o deterioro de cornisas y esquinas de piedra que provocaban continuos desprendimientos. En 2017 se abordarán además actuaciones en el jardín del Palacio de Navarra para posibilitar el acceso de vehículos.