El equipo blanco endereza la final de la Supercopa al imponerse al Barcelona 1-3 pese a jugar varios minutos con Cristiano expulsado. Los goles blancos fueron de Piqué (pp) 49', Cristiano Ronaldo 79' y Marco Asensio 89', que sentenció el partido. Por su parte, Messi 76' hizo el único del Barcelona.