Aunque hay padres que lo logran y no necesitan echar mano de los abuelos para que cuiden a los nietos estos días en los que los más pequeños siguen de fiesta una vez finalizada la Semana Santa. El calendario laboral y escolar no son parejos y a muchas familias no les queda otra solución. La imposibilidad de contratar un/a canguro por motivos económicos provoca que los abuelos sean el refugio al que acuden para el cuidado de los más pequeños. Estos se muestran encantados de ayudar a sus hijos y pasar tiempo con sus nietos. Los parques infantiles están abarrotados estos días con el buen tiempo.