Este indicador proporciona un avance del IPC que, en caso de confirmarse el próximo 12 de mayo, implicaría un nuevo repunte de la inflación interanual, al subir tres décimas respecto a la registrada en marzo (2,3%). De esta forma, los precios de consumo encadenan ocho meses al alza, aunque momentáneamente se rompe la tendencia a la moderación de esas subidas que se había iniciado en marzo